sábado, 2 de agosto de 2014

De Vinilos y Otras Glorias MCXXXIII

Magnífico y emocionante, un grupo con un poderío de los que te hacen saltar hacia donde todo es del color que nosotros deseemos.


T.2. (T.2.) 1970


Power trío de Prog. duro y sin concesiones, T.2. son uno de los mejores ejemplos del estilo en las bandas formadas en el reino unido durante el período. Tras el tremendo álbum de presentación que les supuso el reconocimiento como grupo firman este "T.2." que en realidad son los temas propuestos para su segunda obra que no vio la luz en su día debido a la escisión de la banda.
Con una calidad instrumental fuera de dudas, especialmente esa guitarra dura, seca, desgarradora y tremenda de Keith Cross el disco continúa en la línea del mejor Hard Prog. con las claras influencias hendrinianas que Cross no ocultaba en absoluto y que le hacían llegar a momentos épicos de composiciones sin límites. La sección rítmica se encarga de arropar a las seis cuerdas demoledoras en los momentos más duros haciéndote levantar del asiento y en los instantes melódicos jugando perfectamente con el ritmo mientras Cross sigue a lo suyo. El bajo de Bernard Jinks monumental cuando cabalga a tumba abierta junto a la batería de Peter Dunton.
Minimalista en ocasiones, subterráneo pero de una fantasía que envuelve toda la Música que lo compone "T.2." se transforma en un trallazo en el cual tiene cabida la suite que evoca los momentos más bellos de la instrumentación del grupo, "T.2." tremendo tema de 14' en el cual se demuestra esa desgarradora manera de componer y la violencia elegante de lo que dan.
Es en esta su segunda obra en la cual manejan mejor los cánones compositivos con un elenco más amplio, atreviéndose con momentos de relativa calma en los cuales las melodías acarician la piel desde lo más profundo ("Timothy Monday" o "The Minstrel" son momentos de inspiración en los cuales los sentidos descansan tras la tormenta) con el uso del melotrón y órgano manejados por Cross que resaltan un poco más el sentido Prog. de la Música. Junto a estos temas de nuevo el talento y la magia de Cross se van hacia donde quiere en canciones en los cuales la guitarra toma otra dimensión, como "Careful Sam" o "Fantasy" todo ello consiguen que se convierta en uno de los músicos legendarios de la era Prog. en ese contexto tan minimalista como icónico.
Un disco fantástico si te gusta el poder y la fuerza de una Música que por sí sola merece la pena escuchar pero que llevada a estos niveles no tiene precio hacerlo.


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