domingo, 20 de julio de 2014

De Vinilos y Otras Glorias MCXIII

Un mito de una Música que más allá de entendimientos abrió la puerta a toda una forma de cultura arrastrando mucho de lo que se hacía por entonces.


Can (Monster Movie) 1969


A pesar del álbum "Delay" que son piezas anteriores a lo que el grupo realizó como tal se puede considerar (y de hecho creo que es así según la propia discografía de Can) este "Monster Movie" como el disco debut de la banda alemana. 
Un icono del Krautrock más radical y de la Música que además se daba la mano con el ideario político que los miembros practicaban. Uno de los primeros grupos en abrir las puertas a la experimentación y hacerla grande a través de sus conciertos y demostraciones públicas como seña de identidad de esa corriente que dentro de la Música en Alemania elegían el Rock de corte más brutal y extremo en su concepción consiguiendo además un éxito más que notable.
"Monster Movie" es Can en estado puro, eso sí pudiéndose aún apreciar esos primeros pasos en lo que fue una carrera dirigida a destrozar conciencias, con algún que otro toque a lo Velvet Underground y sin llegar a lo exquisito en su demostración mental de otros discos posteriores pero ya la entrada de la obra con "Father Cannot Yell" deja bien a las claras por dónde iban a ir cuando se lanzan a experimentar, improvisar y usar todos las herramientas a su alcance para lograr que la Música llegue hasta la mente sin pasar por estaciones previas.
Un disco que nos señala lo que era la Música más oscura y underground en esa zona de Europa que creó su propia corriente. Las guitarras machaconas metiéndose desde la nada y manteniendo esas notas arriba hasta apabullar como en "Mary, Mary, So Contrary" y los teclados con riff acompañándoles que no cesan de querer montarse por encima de la voz a grito pelado (el tema más usual y rockero "Outside My Door" al final deja un poco de lo conocido para lanzarse a tumba abierta entre la desesperación de la garganta de Malcolm Mooney)
Aún así el atrevimiento del grupo, algo que siempre ha sido parte de su sello es indudable con la enorme suite de 20'27'' que ocupa toda la cara B del disco y que sirve al grupo para volver a esa libertad creativa que te hace partícipe y de la que no escapas cuando tu mente viaja al ritmo impuesto por la banda.
Un disco para conocer el origen de un mito que fue creciendo dentro de un estilo único y a contracorriente de casi todo, fascinante y visceral.
Irmin Schmidt órgano. Jacki Liebezeit batería. Holger Czukay bajo. Michael Karoli guitarra. Malcolm Mooney voz.

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