sábado, 5 de abril de 2014

De Vinilos y Otras Glorias CMLXXVIII

Un gran grupo en una gran obra, dicho esto nos ponemos a ello y dejamos que la Música haga el resto (que por otra parte valdría para cualquier situación)


Titus Groan (Titus Groan) 1970


Por desgracia y esto ya va siendo tónica habitual por manejarnos con tantos y tantos grupos Titus Groan nos dejaron un sola obra, este disco homónimo que es un reflejo del talento inmenso que atesoraban, que lo vaciaran todo en este disco me extraña, el caso es que no hubo más y como tal debemos disfrutar de él, el principio y el final de la historia.
Tomado de una trilogía de Mervin Peake y con una portada de lo más sugerente en su significado el nombre del grupo podría darnos a entender un disco de corte sinfónico basado en la vuelta de Música traída de lejanos tiempos, pero nada más lejos de la realidad.
El estilo de Titus Groan es brillante, encontrándonos en el vinilo temas que además de estar concebidos a modo de suites largas y muy elaboradas nos dejan una amalgama de estilos que se entrecruzan sin ningún problema en las composiciones complejas y que van recorriendo el Folk, Rock, Hard, Blues... dejándose bastante claro en la larga y hermosa suite en cuatro actos llamada "Hall Of Bright Carvings".
La contundencia de la sección rítmica, especialmente el bajo de John Lee le hace ser parte importante en unas composiciones que no escatiman dureza y sensibilidad a partes iguales, una perfecta combinación entre las cuales las cuatro cuerdas salen airosas con un poderío inmenso, genial, una manera de hacerte sentir en las tripas el instrumento pocas veces vista. La batería de Jim Toomey un poco más comedida marca los ritmos con solvencia y sin alardes dejando a Lee que lo rompa todo.
Ante las andanadas de sonidos diversos y elaborados "Titus Groan" se convierte en una orgía para instrumentos solistas como la flauta que rememorando a los más grandes se da un festín en los temas, especialmente en la suite ya mencionada o en "It Wasn't For You", brutal. Las entradas del saxo, todas como la flauta a cargo de Tony Priestland son usadas en momentos más duros en los cuales los ritmos se rompen en mil pedazos, eso sí, sonando con la misma efectividad.
Los teclados son los que en este caso sirven más como envoltorio, llenando el aire pero sin aparecer en ese primer término en el cual los instrumentos de viento y la guitarra de Stuart Cowell siempre están (lo del bajo es aparte ¡¡qué bestia!!)
Un tremendo disco de Prog. de temazos elaborados y cuidados hasta decir basta, una interpretación exquisita y la seguridad de un viaje garantizado hasta...
¡¡Sigue atreviéndote!! si hasta ahora no te han dicho nada imagínate a partir de aquí, lo normal es que ya estén a años luz de nuestros sueños.

Side A:  It Wasn't For You;  Hall Of Bright Carvings;  Open the door Homer;  Woman Of The World
Side B:  I Can't Change;  It's All Up With Us;  Fuschia;  Liverpool


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