viernes, 4 de abril de 2014

De Vinilos y Otras Glorias CMLXXVI

Seguimos por los senderos del Prog. Música excepcional y mágica que me lleva a los límites del placer sensorial (y del que sea…)


Marsupilami (Arena) 1971


Clásico grupo de Prog. de los que no duraron mucho, en este caso dos obras que en mi opinión son más que interesantes, al menos para dedicarles una escucha y a partir de ahí…
“Arena” es el segundo álbum de la banda que como todo el tiempo durante el cual estuvo activa nos ofrece un Prog. clásico basado en el trabajo de órgano y flauta como fondo de las composiciones por las cuales van alternándose los distintos instrumentos que forman el conjunto según los temas de los que se trate. Temas de atmósfera Folk melódico con la suave textura de esta Música que se apoya en las guitarras dulces y melancólicas, aunque quizás poco usadas para lo que se puede percibir, que conviven con otros de extrañas melodías oníricas recordando extrañas tierras o lugares de fantasía; Algunos ramalazos de furia demoníaca para salir del sueño con continuos cambios de ritmo ayudados además de los instrumentos por un conjunto vocal brillante que a dos voces, como solistas o coros emiten lamentos a modo de quejas profundas que llaman a suspirar.
Oscuro trabajo en la línea de todo lo que el grupo indica en sus propuestas que con su título da una idea de lo que puede ser, aumentado el grupo con Peter Bardens y el cantante y flautista Bob West, un álbum conceptual de corte histórico sobre la antigua Roma que comienza de manera intensa y frenética con “Prelude To The Arena” una carrera contra el tiempo a base de guitarras con una parte central en la cual los teclados lo ocupan todo relajando el ambiente y un final vehemente a base de gargantas que sufren y escupen al viento sus lacónicas palabras.
Un disco de estilos dentro del estilo, a pesar de mantenerse como guía de lo que sugiere ese Folk ácido de finales de los sesenta, interesante y llamativo por la propuesta, musicalmente tremendo y técnicamente muy cuidado, quizás se eche en falta esa continuidad que supone una obra conceptual pero no por ello se pierde la esencia de lo que pretenden enseñar.
Para escuchar con ganas y disfrutar (de nuevo, ¿por qué no?) de esa Música que nos lleva fuera de nuestros sueños, el Prog. elegante y cuidado que supone una gozada para quienes no queremos quedarnos en la orilla y a partir de aquí lo que venga.
Fred Hasson voz, percusión y armónica. Dave Laverock guitarra, percusión y voces. Leary Hasson teclados. Mike Fouracre batería y percusión. Ricky Hicks bajo. Jessica Stanley-Clarke flauta y voces. Mandy Riedelbanch saxo, flauta y percusión. Bob West voces y flauta. Peter Bardens percusión.

A:  Prelude to the Arena;  Peace of Rome;  The arena;  
B:  Time shadows;  Spring

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