sábado, 1 de marzo de 2014

De Vinilos y Otras Glorias CMXLIII

Navegamos sin rumbo fijo, guiándonos por el sonido que nuestra Música a modo de cantos de sirena nos sugiere para detenernos. Cualquier puerto es bueno si esos sonidos desembarcan en ellos.


The West Coast Pop Art Experimental Band (Part One) 1967


Tras este nombre de siete palabras que en sí mismo puede definir al grupo o no decir nada referente al mismo se encuentra otro de los iconos (incomprendidos en la época entre el público y la crítica) de la Psycho más pura y radical.
De hecho pocas portadas y contra portadas definen tanto y tan bien una época de ácidos, viajes sin retorno (algunos de ellos) pérdida de la inocencia en un mundo de amor y flores y la experimentación de la Música cuando todo tenía cabida por esa libertad creativa que no sólo se suponía (como ahora) sino que se lograba.
Tres músicos con una ilusión a prueba de bomba y un iluminado que llevaba la bomba en el cerebro y sus desvaríos también se pusieron manos a la obra para recrear ese universo de psicodelia, luces e iluminaria sin mesura y Música, maravillosa y de calidad. La presentación en sociedad con este "Part One" a nivel de historia, porque en realidad es su segundo trabajo, nos deja una obra de ritmos enloquecidos cuando la Psycho deja correr la sangre por las venas, melodías exquisitas y preciosas si las voces resbalan por los sueños con tremendos instantes de sutil armonía (lo de "I Won't Hurt You" o "Transparent Day" son delicatessen para dejarse ir) momentos de experimentación con la voz a modo de gurú del iluminado Bob Markley que recita mientras las distorsiones y efectos cubren todo ("1906", "Help, I'm A Rock", "Leiyla" son excepcionales locuras transgresoras que me apasionan)
Todo ello conforma una obra que nos deja el regusto por su corta duración, no alcanza los treinta minutos de efervescencia Psycho, pero que consigue que nuestra mente vaya con ellos hacia esos paisajes inexistentes si no son creados por la mente y quien recibe los delirantes sones que emiten, un viaje alucinante donde todo es posible.
Libertad creativa transformada en libertad musical cuando los surcos dejan escapar las notas de este proyecto tan fascinante como emotivo que por fin se puede degustar tras el ostracismo de su época, una aventura donde la mente es la guía, y eso no tiene precio.
Si quieres experimentar otro salto sin red, prueba con The West Coast Pop Art Experimental Band y quizás te des cuenta que pensar en tres dimensiones es quedarse corto.

SIDE ONE:  Shifting sands;  I Won't Hurt You;  1906;   Help, I'm A Rock;  Will you walk with me
SIDE TWO:  Transparent day;  Leiyla;  Here's where you belong;  If you want this love;  Scuse me, Miss Rose;  High coin

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