martes, 6 de agosto de 2013

De Vinilos y Otras Glorias DCCLIV

Un artista que no cesa y que tiene mucho que decir a ciertos nombres que son porque no pueden serlo de otra manera, sin embargo aquí hay autenticidad a borbotones.


Ian Hunter (You're Never Alone With a Schizophrenic) 1979


Ian Hunter llegó tarde al mundo de la Música, al menos la que se escribe con mayúsculas pero una vez en ella nunca se ha bajado del carro de la calidad y el buen hacer, sin ser un genio, sin llenar páginas de libros ni revistas, simplemente siendo un músico como la copa de un pino y haciendo Rock'N'Roll del que nunca jamás se va a perder, porque es algo eterno.
Cuando comenzó su carrera en solitario allá por el año 75 no le fue fácil despegarse de esa etiqueta que traía de un grupo que causó sensación y quizás sus comienzos fueron menos de lo esperado, pero bien porque ya no tenía nada que perder, bien porque todo es aprender y seguía haciendo lo que sabía, en el cuarto trabajo como solista dio con la tecla y le salió un disco de Rock redondo, de los que siempre hay que escuchar porque sirve para llevarte a las estrellas con su energía y poderío.
Rock'N'Roll, del bueno, con clase y a partir de las entrañas, de esos pedazos de fibra que se te pone de punta cuando lo escuchas, temas que se quedan en la memoria y tarareas cuando menos te lo esperas porque además son esencia de una Música que jamás morirá.
"You're Never Alone With A Schizophrenic" es un tremendo trallazo al alma, nueve pedazos de sensaciones en clave de Rock, guitarras limpias y elegantes, riff de los de toda la vida, pianos que se desenvuelven por cualquier rincón sin problemas, voces y coros para soñar y una sección rítmica que te sube a las estrellas. Saxos, vientos con arreglos de calidad y mucho oficio y un conjunto en la producción que lo bordó para hacer una obra de las de siempre, de las que te impregnan con cada nota y sabes que vas a degustar hasta que el disco acabe.
Con su amigo, camarada y genio de la guitarra a su lado, el maravilloso Mick Ronson, Ian Hunter se marca un disco de estilo, con la serenidad de quien ha llegado y busca algo más para su placer, bordándolo con la voz, esa garganta de rockero de la vieja escuela, atacando los teclados y el piano como quiere y dejando que los coros le arropen cuando descansa en algunas estrofas.
Junto a estos dos monstruos media E Street Band en plena forma para una grabación de lujo, Max Weinberg a la batería, Gary Tallent en el bajo y el maestro del piano y teclados Roy Bittan dando una exhibición. George Young y Lew Delgatto en los saxos completan una banda de sesión para perderse, puro Rock en las venas de cada uno y así salió lo que salió.
El disco configura una etapa clave en la carrera solista de Hunter, de aquí salieron himnos que siguen siendo parte de sus actuaciones y la gira de presentación del trabajo ya con una banda al uso fue un crack inolvidable.
Si te gusta el Rock'N'Roll y disfrutar de la Música este es un disco eterno, para siempre, donde uno se pierde y vuelve después de mucho tiempo para reencontrarse de nuevo con eso que llamamos magia.

Side One:  Just another night;  Wild east;  Cleveland Rocks;  Ships;  When the daylight comes
Side Two:  Life after death;  Standin' in my light;  Bastard;  The Outsider

2 comentarios:

  1. Una manera brillante de mitigar el calor sofocante de esta noche e intentar escabullirme de este infierno, es sin lugar a duda escuchando buena Música. Y con este disco parece que he conseguido que corra el aire.
    Standin´in my light, Ships,... y ya empiezo a notar como entra la brisa.

    Felices sueños.
    Refrescantes Besos con hielo.


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    1. La Música refresca el espíritu, la buena Música... lo que quieras.
      Besos

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