martes, 14 de mayo de 2013

De Vinilos y Otras Glorias DCCIV

Una de las primeras bandas con las que empecé a amar ese sonido incandescente llamado Hard, aunque se me fuera olvidando hasta retomarla años después.


R.E.O. Speedwagon (R.E.O./T.W.O.) 1972


El segundo disco de la banda americana sigue los pasos de su debut, para mí el mejor trabajo de su carrera, con ese Hard potente y en algunos casos duro que fue perdiendo a lo largo de los años. En esta primera etapa, aunque también se les fue viendo el "descafeinamiento" de su Música hasta hacer ese "AOR" que tanto gustó durante una época y del que omito opinar (salvo honrosas y muy nobles excepciones) sus composiciones destilaban un buen puñado de poder en forma de notas, una Música agresiva y potente que no desmerecía de lo que se hacía en esa gloriosa etapa setentera.
"R.E.O./T.W.O." trae una banda en plena forma, con ganas de comerse el mundo, la formación clásica de sus mejores momentos tras cambiar de voz solista a la peculiar garganta de Kevin Cronin, un registro particular y fácilmente reconocible que parece alejado de los standares del Rock Duro pero que se maneja de manera fácil y segura entre riff poderosos y golpes al estómago.
Convertido en líder indiscutible de la banda, Gary Richrath firma la mayor parte de los grandes temas del grupo, y en este disco junto a Cronin todos los que son de la banda, una manera de componer realmente tremenda, con temas que no eluden los complejos paseos más allá de los seis minutos en preciosas melodías aderezadas con la contundencia de una Música grande.
En formato clásico de quinteto, Richrath se erige como un guitarra alrededor del cual gira la Música del grupo, riff tremendos que alterna con solos limpios y cuidados, técnica depurada y exquisita. Junto a su guitarra la de Cronin ayuda a esos ritmos que llevan hasta las estrellas.
Los teclados de Neal Doughty son el contrapunto ideal a esas guitarras, con solos de piano y "Hammond" a la vieja usanza y ritmos para envolver el conjunto.
Como todo buen disco de Hard, una sección rítmica impecable, poderosa y sin fisuras a cargo de Gregg Philbin en el bajo y Alan Gratzer en la batería, sin ser unos virtuosos dos músicos que soportan sin esfuerzo la Música del grupo.
Ocho temas de puro Hard, hasta aquí realmente un grupo que mama el estilo y lo traslada a esos surcos que destilan fuego, con temazos para soñar despiertos como ese brutal "Golden Country" donde las guitarras se pasan de rosca, la preciosa "Like You Do" o esa descarnada versión de un clásico como "Little Queenie".
Un disco de Música para escuchar en cualquier ocasión y disfrutar con ello, que no es poco.

A:  Let me ride;  How the story goes;  Little Queenie;  Being Kind
B:  Music man;  Like you do;  Flash tan queen;  Golden Country

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