domingo, 17 de marzo de 2013

De Vinilos y Otras Glorias DCLXVII

Otro trallazo directo a las entrañas, total nos lo llevamos puesto y así disfrutamos un poquito más, para cuando no haya.


Ten Years After (Recorded Live) 1973


La esencia de un grupo es la Música, y para algunos grupos esa Música deben expresarla donde mejor saben, sobre un escenario y empapándose de la energía que les da el contacto con el público, porque eso es lo que desean y además necesitan.
TenYears After merecía habernos visitado hace mucho tiempo, pero como en esto casi que no me controlo ni yo mismo, nunca es tarde mientras se pueda y por fin nos deleitamos con el placer de tenerles entre nosotros.
Tampoco ha sido fácil elegir con qué, pero bajo la premisa dicha anteriormente, este doble en directo me parece una carta de presentación bastante adecuada, porque si bien no representa lo que el grupo era cuando estaba realmente a tope (he podido ver directos suyos y son la traca) sí se acerca a lo que en esa época, una etapa de agotamiento por las innumerables giras y los continuos conciertos, hacían.
En el propio disco, un doble vinilo a la vieja usanza, como a mí me gusta, reza lo siguiente "This is the official Ten Years After bootleg" de modo que así las dudas quedan despejadas.
El doble resume lo que eran en vivo, pura dinamita, excepcionales temas que se convertían en jams eternas pasadas por ese Bñues - Rock tremendo que hacían suyo hasta la extenuación, convirtiendo esas joyas del Blues más clásico en trallazos de electricidad directa a los sentidos.
Cuatro músicos liderados por el carisma y genio de Alvin Lee, un guitarrista como pocos, entregado a la Música y lo que era, absolutamente magistral en su manera de concebirla y un animal de escenario para el que las horas no significaban sino el comienzo del siguiente show.
Junto a él, tres musicazos que entendieron lo que se podía hacer y siguieron esa pauta, como ese brutal bajista llamado Leo Lyons, un músico que parecía poseído cuando tocaba, parte de su instrumento y con un sentido del ritmo alucinante. Rick Lee, un batería al uso ideal para completar esa base rítmica sobre la cual Alvin podía jugar, idear, crear y hacer lo que le diera la gana, y para completar el combo Chick Churchill en los teclados, dando esos ambientes que sobre todo la Música de Blues eléctrico que hacían necesitaba.
Cuatro caras, doce canciones para 79'46'' de pura tralla, temas clásicos realizados en versiones alucinantes, los del grupo jugando con el tiempo y esos finales de show tan de los Ten Years After arrasando con todo lo que tenían.
Un disco para disfrutar de la Música, de la muy buena Música, un período apasionante con un grupo que marcó época por su forma de entenderlo, hacerlo y sobre todo entregarlo, un disco para conocerles y saber por qué ahora es tan difícil. 

SIDE ONE:  One of these days;  You give me loving;  Good morning little schoolgirl
SIDE TWO:  Hobbit;  Help me
SIDE THREE:  Classical thing;  Scat Thing;  I can't keep from cryin' sometimes
SIDE FOUR:  Silly thing;  Slow blues in "C";  I'm going home;  Choo choo mama



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