De Vinilos y Otras Glorias DXXXV

Un poco de marcha, que nunca viene mal, desde la perspectiva de ese mundo Prog. que simplemente me excita, y a partir de ahí... lo que venga.

Pink Fairies (Never Never Land) 1971

Venidos en tres cuartas parte de la banda Deviants, los Pink Fairies provocan un giro radical de entender la Música y vuelven al concepto underground de los años sesenta pero traducido a un Hard poderoso de esos principios setenteros auténticamente maravillosos.

Rock duro sin concesiones con las guitarras como centro de las composiciones, un poderoso recorrido por tipos de temas complejos en forma de baladas hasta desgarros guitarreros en plan Hendrix, como en el tema "War Girl", todo ello, eso sí, soportado por la impresionante labor a la batería de un mito del instrumento, el gran John Alder (Twink) una barbaridad capaz por sí solo de dotar a la banda del sentido del ritmo necesario para que todo encaje perfectamente.

El disco contiene una amalgama de sonidos que no tienen desperdicio, desde la balada "Never Never Land", una especie de viaje psicodélico a la tierra de Peter Pan hasta un breve flash back lisérgico en la espectacular por su creatividad "The Dream Is Just Beginning", un recorrido fascinante por la Música mamada a base de tralla por los cuatro miembros de la banda, que suena a gloria.

Paul Rudolph en las guitarras y voz, una técnica depurada, simplemente mágico, salvaje cuando se requiere y dulce y delicado al acariciar la piel. Sus punteos sostenidos en el infinito son una delicia.

Duncan Sanderson en el bajo y voz, la "segunda" guitarra de la banda, con constantes cambios y los devaneos de las cuatro cuerdas sin pausa.

Dos baterías impregnan de poder al conjunto, el ya mencionado Twink, un portento que va y viene, da y recoge, marca y lleva, una auténtica maravilla a los timbales, acompañado en la segunda batería y percusión por Russel Hunter, otro que se las trae cuando pega.

Una banda genial al servicio de unas composiciones tremendas que se sustentan en las interpretaciones exquisitas, realizadas con el gusto y la clase de cuatro grandes músicos.

Diez temas que son como una historia que pasa ante tus oídos con la facilidad de la Música bien hecha, "Do It" es un himno a la rebelión y un canto y homenaje a la contra cultura hippie; también hay espacio para la anarquía y el impacto a los sentidos sin tomar prisioneros, como la tremenda "Uncle Harry's Last Freak-Out", 10'51'' de puro aullido que sirvió de inspiración a grandes del radicalismo musical como los Dammed, Motorhead, Sex Pistols...

Un disco que para el que suscribe es una joya, por su propuesta, por la maravillosa manera de plasmarla en el vinilo y por esos músicos que dan un recital.

Pink Fairies, un grupo para descubrir y subirte a lo más alto de lo que pudo ser y ya no será nunca porque "Aún era posible..."

La portada una maravilla de imaginación con una bolsa de plástico exterior que cubre un álbum precioso que a su ver oculta el disco y un cartón con los créditos.

Side One:  Do It;  Heavenly Man;  Say you love me;  War girl;  Never-Never Land

Side Two:  Track one side two;  Thor;  Teenage rebel;   Uncle Harry's Last Freak-Out;  The Dream Is Just Beginning