sábado, 1 de septiembre de 2012

De Vinilos y Otras Glorias DXXVII

Volvemos o nos vamos, que nunca lo sé, pero ahora, por aquello de los golpes mentales que me vienen, nos damos una vuelta por esos universos iluminados de algunos genios que nunca siguen la norma.


Deviants (Ptooff!) 1967


Entre nosotros aparece uno de esos extraños trabajos de los cuales me cuesta decir dónde, cómo, por qué, pero que a la postre son los que más me fascinan por la propuesta que se atreven a dar, y como en todo, para gustos los colores, pero yo concedo muchíiiiiisimos puntos a quienes con clase y estilo buscan ofrecer algo nuevo.
Lo dicho, ni psycodelia ni Prog. más radical y absolutamente mental, o todo lo contrario para que nos entendamos, "Ptooff!" es la primera obra de un auténtico iluminado llamado Mick Farren y los que tuvieron agallas a seguirle en este universo tan emocionante como especial.
Deviants surgieron de lo más profundo del Underground inglés, un grupo de culto y pieza angular de esta corriente por su manera de entender los sonidos y su forma de expresarlos en esa década prodigiosa donde todo era emocionalmente posible.
Casi adelantados a su tiempo y germen del Prog. más radical, son una formación de referencia para el movimiento, y esta su primera incursión como disco una joya que se ha valorado mucho más cuanto más tiempo ha pasado dado el carácter absolutamente genial de lo que hicieron. Pura Música Freak por definición, por interpretación y por imagen, esta obra y lo que representa convirtieron a la banda en el grupo guía e inspiración del Rock "Maldito, Malo y Sucio" de los setenta.
De hecho esta grandiosidad que es "Ptooff!" se considera por muchos músicos el inicio de la escena Underground como tal, manifiesto de arte, Música y contracultura así como obra de importancia histórica.
Un Rock primitivo, duro, melódico y disonante al mismo tiempo, agreste, con actitud rebelde y enfrentado a toda norma, Música anárquica, con un poco de todo, psycodelia, Blues-rock, hard, folk ácido, improvisaciones sin pausa, y una absoluta declaración de intenciones en la línea de la pura y maravillosa locura freak en un tema que es casi un himno, "Deviation Street"
Mick Farren se encarga de las voces, o la voz, o esos angustiosos gritos y melódicos cánticos, así como del piano.
Sid Bishop en la guitarra y el sitar, apabullante con sus desvaríos e interpretaciones asonantes.
Russ Hunter en la batería y voz y Cord Rees al bajo, guitarra española y voces.
Coros a cargo, además de los mencionados, de Sanderson, Sparkes y Ashworth, todo ello para crear esa atmósfera de "La parada de los freakis" que tanto abruma.
Un disco para saborear, escuchar con la calma, sin esperar nada que no sea lo que te vaya llegando, dejarlo desarrollarse y perderse en su mundo, un lugar ajeno a esto que tenemos donde se puede ser de nuevo, y eso es de agradecer.
Para mí una propuesta fascinante, una joya mental hecha Música, una maravillosa sensación.
La portada, puro "Pop-Art", preciosa y descomunal por la crítica que lleva en esos dibujos que lo dicen todo.

Side One:  Opening / I'm Coming Home;  Child of the sky;  Charlie;  Nothing man
Side Two:  Garbage;  Bun;  Deviation Street




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