sábado, 1 de septiembre de 2012

De Vinilos y Otras Glorias DXXV

Otro paseo con un grupo que fue el germen de muchas cosas y la continuación de muchas otras, porque en ciertos momentos, lo de unir talentos debía ser demasiado fácil (lástima en estos tiempos)


Traffic (Traffic) 1968


Pura fantasía, esto es el segundo trabajo de una banda memorable que aunque más adelante se fue difuminando por caminos y territorios más "extraños", en sus primeros pasos dejó perlas cultivadas del calibre de este "Traffic", una joya en estado puro de la Pycho y ese Prog. que tanto nos apasiona.
Segundo trabajo, final de una época con Dave Mason (aunque volvería en colaboraciones y conciertos varios) y la demostración del talento de varios músicos sobradísimos para esto de crear sonidos de manera excepcional.
Una obra donde se representan dos estilos distintos y bien diferenciados de componer, la tremenda capacidad creativa de Dave Mason por un lado y el dúo formado por Winwood-Capaldi por otro, con una excepción en la preciosa "Vagabond Virgin" en la cual se unen Mason-Capaldi. Quizás esto fue la grandeza y a la vez el final de algo que podría haber llegado a las estrellas, pero es lo que hay, y tanto en esta obra como la precedente, ese descomunal disco llamado "Mr. Fantasy" se demostró que estaban al margen de lo que se estilaba.
Steve Winwood en estado de gracia, al mando de una aventura apasionante, con su voz recorriendo los espacios de sus temas, arañando con ese "Hammond" que es pura gloria, además de las guitarras, el bajo... un musicazo.
Dave Mason en plena lujuria compositiva, con esa voz tan auténtica en los temas de su creación, la guitarra ardiendo entre sus dedos, además de la armónica y el bajo.
Jim Capaldi, uno de mi héroes olvidados, quizás demasiado a la sombra de... encargándose de las percusiones y los coros maravillosos de un músico excepcional.
Chris Wood completa el cuarteto, un músico global que dota de los sonidos más especiales al grupo, encargándose de las flautas, saxos, percusión y voces.
Un disco que es una maravillosa obra de arte con diez temazos que no tienen desperdicio, andanadas de Música superlativa que te arañan las entrañas, temas de siempre, eternos, como ese sello llamado "Feelin' Alright?" una de las canciones más versioneadas, la tremenda y brutal "Pearly Queen", puro fuego, o ese trallazo llamado "Forty Thousand Headmen" para quitar el hipo.
Un álbum de lo que están por derecho propio en la historia de la Música, esa hecha con la clase de los genios, la que no se puede olvidar porque te llega hasta lo más profundo y después lo llevas puesto de por vida. 
"Traffic" fue el final de un sueño, el principio de otros muchos y una obra esencial para comprender lo que se hacía en una época en la cual los músicos expresaban sin ataduras lo que realmente sentían, y eso se nota ¡¡vaya si se nota!!

Side 1:  You can all join in;  Pearly Queen;  Don't be sad;  Who knows what tomorrow may bring;  Feelin Alright?
Side 2:  Vagabond Virgin;  Forty Thousand Headmen;  Cryin' to be heard;  No time to live;  Means to an end










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