Dejé a mi corazón encerrado (otra vez)
El día en que te volví a ver.
De otra manera no hubiera podido
mirarte a los ojos como ayer.
Tuve que atar fuerte mi lengua
para no dejarle decir lo que quería.
Vacía quedó mi boca sin tus besos.
Como la nube borrada con suave brisa,
como el rocío barrido por el viento,
así mi fuerza de silencio se disipa.
Un mundo de almas gigantes nos separaba
Cuando dos pequeños soles te llamaban.
La lluvia y el mar se secaban en mi mirada.
La noche se escondía dentro de mi alma.
Hacía compañía a un corazón golpeado.
Se hizo una con mi corazón encerrado.
Diego L. "Apuntes del interior y otros poemas" Extracto
Reproducido con permiso de Vicky
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