lunes, 2 de julio de 2012

De Vinilos y Otras Glorias CDLXIV

No me cansaré nunca de ellos, y de no ser porque hay muchos y maravillosos, los traería una y otra vez hasta saciarme, porque son simplemente parte de mi vida en lo que soy a través de la Música.


Wishbone Ash (Pilgrimage) 1971


Una de las más grandes bandas de la historia del Rock, y para mí una de las más grandes bandas de la historia, deslizándose en este "Paseo Por Los Sueños" con su segundo trabajo, otra joya de infinitos quilates como demostración de lo que eran y crearon.
Si su arranque en el mundo de los sonidos fue espectacular, esta vuelta de tuerca que crearon con el "Pilgrimage" es otra fantasía para recordar eternamente, y es que se permitieron mover ficha dentro de su propio estilo para hacer un trabajo que sin salirse de la textura del Rock, con ese sonido Wishbone que sólo ellos hacían, fue mucho más acústico, preciosista y en ocasiones rozando el Folk más puro, dejando un disco excepcional, maravilloso y bello, que a mi modo de ver no se le ha dado todo el valor que tiene un poco tapado por las obras inmensas (que no le superan en absoluto) que nacieron alrededor suyo, tanto antes como después.
La banda clásica, un grupo mítico, realmente irrepetible (y no desmerezco a otros músicos que han pasado por la banda y que son genios, pero esto es...) con las guitarras gemelas manejadas por Andy Powell y Ted Turner, el bajo de Martin Turner y la batería de Steve Upton. Seda en los instrumentos y seda en las voces de Powell-Turner-Turner, un trío de vocalistas excepcionales que hacían juegos malabares con las voces, los coros y los tonos entrecruzados, una delicia para los oídos.
40' de orgía sensorial repartidos en siete monumentos de creatividad, imaginación y capacidad compositiva, con esas piezas de sensibilidad instrumental que son "Lullaby" y "Alone" para morirse de gusto.
Mucho se habla de riff de guitarras famosos, pero pocos llegan a la calidad que imprimen en ese "Jail Bait" que es un clásico entre los clásicos. "Valediction" y sus 6'17'' conforma una calidad compositiva que junto a la forma de interpretar hace único el sonido de la banda, y ese monumento llamado "The Pilgrim" que en sus 8'30'' simplemente te lleva a las estrellas.
"Vas Dis" flirtea con un poco de jazzy y coros, y el final apoteósico de "Where Were You Tomorrow" y esos 10'23'' en directo para que te vayas lejos, muy lejos.
"Pilgrimage" es un disco mágico, una joya de la Música en general, fuera de estilos y tiempos, al margen de modas y leches de productores iluminados, una obra tremenda para espíritus sensibles, capaces de ver más allá de cada nota o cada sonido, porque todo te lleva a él, por encima de lo que escuchas, se te mete hasta las entrañas, y de eso tienen la culpa cuatro genios que crearon un sueño.
Disfruta si quieres, es la Wishbone, pero ¡¡qué voy a decir yo al respecto!! es "mi Wishbone..."


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