miércoles, 20 de junio de 2012

De Vinilos y Otras Glorias CDLIII

Un tipo casual, curioso, excepcional, glorioso, magistral o simplemente un músico al cual el Rock'N'Roll enamoró un día y no supo dejarlo. Es un placer traer de nuevo a un genuino artista llamado...


Lou Reed (Transformer) 1972


El neoyorquino de calles oscuras y barrios sin luces dando sus primeros pasos con un disco que marcó lo que fue y es una carrera como músico muy especial.
"Transformer" se convirtió en símbolo de muchas cosas, aunque su idea fuese intentar girar la trayectoria de Reed tras un fracaso comercial con un primer vinilo que a mí me apasiona pero que no caló para nada tras dejar la gloriosa Velvet Underground.
Enamorado del Rock'N'Roll y con un sonido y una manera de componer tan particular como apasionante, Lou Reed se metió en la moda Glam (no sé si por cuestiones comerciales o porque lo sentía así) para dar a luz un soberbio disco que además es seña de identidad del músico, al margen de esas joyas que jalonan su carrera cuando busca algo diferente.
"Transformer" tiene un sonido fresco, llega y encaja a la perfección con la manera de concebir el Rock de Lou Reed, desde la aventura de lo ambiguo que se detecta en la portada y algunos temas del disco hasta los músicos amigos que rodean al artista en esta aventura, especialmente los productores David Bowie y Mick Ronson, que dejan su impronta en la manera de hacer llegar la Música creada.
Todos los temas son de Reed, y aunque ha creado joyas en muchos momentos de su carrera, quizás ese himno que todos hemos tarareado en alguna ocasión, "Walk On The Wild Side" es la seña de identidad de la grabación, particularmente porque es un temazo y por el momento turbulento de su creador en lo personal, aunque acompañan en el vinilo otras joyitas que son de lo mejor de su repertorio, "Perfect Day", "Satellite Of Love" o "Vicious", simplemente mágicas.
El propio Reed se encarga de las guitarras rítmicas, teclados y voces, y por supuesto de la voz, esa particularísima garganta reconocible en cualquier lugar, acoplada a la forma de componer temas a su gusto.
Junto a él el gran Mick Ronson en las guitarras, piano y voces, y no hablo de su categoría porque lo he dicho casi todo todas las veces... un músico genial.
Herbie Flowers en el bajo y John Halsey conforman la sección rítmica, a los que se une en dos magistrales interpretaciones el saxo de Ronnie Ross ("Goodnight Ladies" y "Walk On The Wild Side")
David Bowie a los coros y el gran Klaus Voormann en el bajo ayudan según qué momentos.
El disco es un tratado de Rock'N'Roll, una cadencia que no cesa, ritmos pegadizos, riff que nunca se olvidan y la voz de Reed embaucándote hacia su Música, una verdadera delicia que una vez escuchada encaja perfectamente.
Quizás no lo pretendió, o buscaba otra cosa, pero le salió un disco redondo; los guiños Glam, su desliz hacia lo ambiguo, lo unisexual de todo y lo que rezuma en sí es secundario, importa esa Música que no para de sorprender tema tras tema, hasta dejarte con esa sonrisa en la boca del regusto por lo bien hecho.
Para entender a un grande, amarle u obviarle, un disco realmente especial, y el comienzo de casi todo lo que quiso después.

Side One:  Vicious;  Andy's Chest;  Perfect Day;  Hangin' round;  Walk on the walk side
Side Two:  Make Up;  Satellite of love;  Wagon wheel;  New York telephone conversation;  I'm so free;  Goodnight ladies.


2 comentarios:

  1. Cuando escucho Lou Reed tengo la sensación de esa música que se te mete despacio, que lo hace dejando un rastro mientras lo vas asimilando, me gusta sentirlo así, es algo especial, genial, espera.. Muy Genial! Maravilloso Transformer.
    Besos.

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    1. Un poco de Rock'N'Roll para que la piel se relaje...
      Besos,

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