viernes, 18 de noviembre de 2011

De Vinilos y Otras Glorias CCLXXIX

No sé cómo expresar el placer que me produce traer este disco, quizás porque marcó demasiadas cosas en demasiadas tardes alrededor de un viejo plato que apenas sonaba, quizás porque es parte de mi cultura musical con mayúsculas, quizás por todo.


Lou Reed (Rock'N'Roll Animal) 1974


Este disco es mítico por todo, tanto temas musicales como extra musicales, pero en lo primero es sencillamente una parte de la historia del Rock'N'Roll, realizado por un músico excepcional, un genio que inventó muchas cosas desde lo sencillo, y una banda que ya hemos traído por aquí y que es también eso, historia por sí misma.
Lou Reed lanzado en solitario tras los avatares de su etapa Velvet Underground, tras tres álbumes de estudio maravillosos, embarcándose en una aventura que le llevó a la grabación de este disco impresionante.
En plena época Glam, nunca más salió de la garganta de Lou Reed la voz tan enérgica y aullidos al viento como en este "Rock'N'Roll Animal", donde hace gala de una furia inusitada, a veces visceral, como nunca se le había sentido. Además de este músico único e increíble, se presentaban en escena la banda que tantos días de glorias dio al Rock, Steve Hunter y Dick Wagner a las guitarras, dos genios de las seis cuerdas que se compenetraban a la perfección, cubriéndose en solos descarnados y riff que apuntalaban los momentos de solista del otro, simplemente magia tocando Rock. Prakash John en el bajo, un portento a las cuatro cuerdas y voces, tremendo con su instrumento, un solista más. Pentti Glan en la batería y Ray Colcord en los teclados, dando la réplica con sus ambientes demoledores, en ocasiones casi de iglesia ("Heroin") para formar un grupo excepcional que en directo se superaban.
El disco es, simplemente, sublime, cinco temas que son, uno a uno historia del Rock'N'Roll, todos ellos parte de la vida musical de un artista único, excepcional, particular y soberbio, Lou Reed, el genio neoyorquino que ha dado tanto a la Música, y juntos una auténtica bomba de relojería que en sus 40'32'' no tiene ni un sólo segundo que no merezca la pena.
La cara A se deja para dos alegrías, aunque una es doble, la introducción magistral y que ya es historia y mito de Steve Hunter para unir a una fresca y desenfadada "Sweet Jane", con un Reed genial, jovial, divertido, en pleno éxtasis. "Heroin" es la joya de las joyas, una versión de 13'05'' donde no falta de nada, guitarras demoledoras, base rítmica demencial, solos imposibles, "Hammond" intimista, la voz suave, salvaje, suplicante... una auténtica exhibición.
En la cara B tres temas, más de lo mismo, "White Light / White Heat" la abre con esa cadencia tan rockera en un riff continuado, el bajo lo rompe y la voz casi se desgarra, amen de los solos. "Lady Day" es la más oscura del disco, Lou Reed no quiere tomar prisioneros y la banda se vuelve más dura, áspera, un cambio tremendo. El disco termina con la maravillosa "Rock'N'Roll", que es eso, puro rock, pero en una versión de 10'17'' que quita el hipo, especial mención al solo de Prakash John que se sale, el riff de Hunter es para morirse, la banda entera te pone de aquella manera y para colmo la voz de Lou Reed ya está fuera de este mundo, lo dicho, nunca más estuvo así, desmadrado, "juguetón", salido... maravilloso.
"Rock'N'Roll Animal" es una joya, Imprescindible, básico, fundamental, algo que hay que escuchar, apreciar, saborear, una obra de arte por casi todo, especialmente porque traspasa lo puramente artístico, y eso es algo que no se puede dejar pasar.
La portada, otro icono más, con un Reed glamouroso como nunca, Glam puro y duro, el resto...
¡¡¡Peaso Discooooo!!!




1 comentario:

  1. Lou Reed es magnífico, su estilo único me impresionó y lo seguirá haciendo siempre. Su manera de hacer música es una fuente inagotable de sensaciones, un verdadero genio.
    Gracias por acercarlo con esta maravillosa entrada.
    Besos.

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