viernes, 14 de octubre de 2011

El Escudero Fiel



Debió comenzar en esto de la Música mucho antes, pero realmente su nombre se dio a conocer para todos los que amamos los sonidos allá por el año 99 (del siglo XX, por supuesto) cuando acompañaba al genio en la portada de un monumental disco acústico que fue un antes y un después en la carrera de uno de los más grandes rockeros de la historia, y ahí comenzó a brillar, poco a poco, como esas luces de bajo consumo que se hacen esperar para sentirlas.

Olivier Durand es guitarrista, en boca de su protector y mentor, Elliott Murphy, "El mejor guitarrista de Francia", pero al margen de títulos honoríficos, es, desde hace más de una década, la mano derecha en el escenario de un genio, un mito, y eso es decir mucho, desde luego que sí.
He tenido la suerte de verle tocar en cuatro ocasiones, con el mismo formato de dúo acústico que tanto enamora a E.M., algo en lo que se ha perfeccionado de tal manera que no tiene igual, y en esas cuatro ocasiones he visto crecer a un músico sin pausa, ofreciendo cada vez más y haciendo que la Música ya de por sí maravillosa de su jefe brille un poquito más gracias a esa acústica que con tanta clase toca.
Olivier busca un lugar en el escenario donde su sombra, alargada por las luces, no toque al mito, procura acercar su boca al micrófono sin estorbar el halo de genialidad que emana del rubio neoyorquino, y mientras no se lo diga, espera paciente acariciando la guitarra en sus cuerdas de acero hasta que se lanza furioso a uno de esos solos descarnados que saca de la acústica, puro lujo para los sentidos.
Forman una simbiosis perfecta, a E.M. se le ve tranquilo, relajado, seguro de lo que lleva detrás, sabe que ese espacio está bien cubierto, incluso cuando la banda se amplia a otros dos componentes ese rincón de la guitarra de Olivier no tiene ningún momento de inquietud, sabe que está ahí y que su guitarra, sus manos y su alma están con su Música, y eso es mucho.

Cuando se le ve en el escenario, a pesar de estar en un discreto segundo plano, se siente su presencia porque la Música le sale del alma, tiene tan asumida las melodías que ha compuesto Elliott que su rostro se mete en las seis cuerdas y de pronto el sonido metálico de la acústica estremece el aire, es en esos momentos cuando se sabe por qué está ahí, por qué lleva más de doce años de carretera con su mentor, por qué cada solo de guitarra que le salta los dedos está perfectamente acoplado a la maravillosa Música de un genio.
Olivier Durand es uno de esos músicos imprescindibles para quien los tiene con él, porque entiende la Música y la traslada al escenario, pero entiende sobre todo al creador, se hace parte de su composición y asume lo que debe interpretar, y eso no es nada fácil, ponerte en la piel de otro y hacer en cada momento lo que sabes, intuyes o percibes que quiere, para que todo sea perfecto, para que todo suene como se imaginó... otro. La Música de E.M. es pura magia, y ha tenido con él grandísimos músicos, pero desde hace más de una década nadie ha sabido captar su espíritu como este francés que cuando es presentado en público, tras un solo monumental, un desgarro al viento, o un emocionante y épico duelo de cuerdas, agacha su cabeza y retrocede en el escenario para no ser visto, no provocar que su sombra roce a su jefe, no quitar ni un instante de protagonismo a quien debe tenerlo.

Necesitamos músicos como Olivier Durand, músicos que hagan creíble la maravillosa Música que es concebida por la mente de los privilegiados, que nos haga estremecer por un solo abrasador mientras el que sabe lo que tiene entre manos lo mira complacido asintiendo con la cabeza, porque estos músicos, los que muchas veces se pierden en créditos y no van más allá de lo que son las bambalinas hacen posible que nos empapemos de sonidos que son pura magia, pura clase, puro sueño. Por haberle visto y vibrado con él, a un "Escudero Fiel", un gran músico, sencillo, discreto y emocionalmente enorme.



2 comentarios:

  1. Perfecta descripción de la figura de este músico entregado, alguien que sabe estar a la altura cada vez que se sube a un escenario con E.M., allí se unen la clase y el arte de dos artistas capaces de hacernos vibrar y ponernos por las nubes.
    Esas guitarras no suenan solas ¿no es cierto?
    Besos.

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  2. Cuando entro en "Paseando por los Sueños" siempre me surge la duda de.... ¿¿por dónde empiezo??
    Para mí casi todo es nuevo y desconocido, así que no hay predilección. A veces es una carátula la que llama mi atención, o un número romano elegido al azar lo que me lleva a una entrada llena de emociones y sugerencias. Pero hoy ha sido el título "Escudero Fiel" lo que ha hecho detenerme, porque de ellos también es la gloria y sin embargo poco se sabe. Gracias por recordarnos que sin "Escuderos" no habrían "Quijotes".
    Besitos

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