domingo, 12 de junio de 2011

De Vinilos y Otras Glorias LV

Otra de esas mágicas creaciones que formaron mi amor por la Música cuando era lo más parecido a un bisoño al que alucinaban cosas que me parecían de otro planeta. Lo mejor de todo, poder disfrutar aún con lo mismo tres décadas después.


Rainbow (On Stage) 1977


Comienza a entrarme un cosquilleo en el cuerpo al tener de nuevo en mis manos esta magna obra del Hard de todos los tiempos, y para mí de la Música sea del estilo que sea, claro que a mí el rock duro o el Hard Rock me evoca mis comienzos como amante de la Música, así es que...
Cuando Ritchie Blackmore dejó la nave Purple para embarcarse en otra aventura, pensar que superaría lo realizado era como mínimo una estupidez, porque el mito que dejaba no era fácil de igualar (de hecho mito sigue siendo) pero a mi entender, la primera etapa de Rainbow ha sido de lo más grande que en esta Música se ha hecho.
Sólo les hizo falta dos álbumes de estudio para convertirse en una banda increíble y deseada, pero es que la unión de tres mega músicos en el mismo grupo hizo que eso fuese a más en lo que ellos dominaban como nadie, el directo, donde subían muchos escalones sobre lo que ya eran.
Ritchie Blackmore, Ronnie James Dio y Cozy Powell eran tres increíbles talentos que durante el tiempo que sus egos se lo permitieron (que no fue más de tres años) crearon un universo de Rock Duro difícil de igualar. Ritchie estaba en lo más alto, más aún que en Purple, con un desarrollo de su técnica guitarrística realmente increíble, buscando siempre en el directo llegar más allá, lugar donde desarrollaba su portentosa genialidad sin límite alguno. Dio era "la voz del Hard", un vocalista único con una capacidad vocal como nunca he oído, un talento en estado puro que lo único que necesitaba era encontrar a quien lo explotara. Cozy Powell no necesitaba nada, ya era uno de los más grandes pegadores del planeta, con una técnica única y además formado en diversos estilos, otro mago de su instrumento, único, genial, maravilloso. Si a estos tres monstruos unimos un pedazo de bajista curtido en todas las batallas posibles, Jimmy Bain y un teclista excepcional, Tony Carey, en ningún momento segundones de nadie, tenemos una de las más grandes bandas de Hard de todos los tiempos.
El disco es una recopilación de shows del año 77, con la mítica gira que comenzó un año antes y que dio a conocer al mundo el grupo, reflejando lo que hacían en sus conciertos, Música, más Música y más... 7 temas en cuatro caras, y eso que la primera es generosa y entrega tres (la improvisación que llamaban "Blues" como que no), para que la media no desentone, o sea, exhibiciones musicales tan de la época, grandes jams para gozar en el escenario y el límite en ningún sitio.
La primera cara comienza con la brutal cabalgada que es "Kill The King", tema del siguiente álbum que ya metían en estos conciertos, con la voz de Dio salvaje y casi violenta, la banda arrasando y un poder para que el público ya se calentara antes de empezar. El clásico "Man On The Silver Mountain" es la excusa para unirla a una improvisación de teclados y guitarra que termina con la salida en tromba de "Starstruck" otro brutal trallazo sin concesiones que vuelve al inicio para terminar, tras más de 11' esta cara arrebatadora.
La segunda cara, o la B, o la Dos se va para 15'40'' de exhibición con la maravillosa "Catch The Rainbow" donde Dio demuestra sus dotes, la banda que puede tocar lo que le de la gana y Blackmore que es un genio.
El segundo disco deja la cara A para otra joya, esta de la época Purple, "Mistreated", 13'04'' de nuevo con Dio jugando a lo que quiere, dejando en evidencia a más de uno, la banda haciendo suya esta joya delicada y arrasando al final con improvisaciones de todo tipo, simplemente mágico.
Termina el disco con otros dos temazos, "Sixteen Century Greensleeves" y "Still I'm Sad", la única concesión a un tema ajeno a los componentes del grupo, donde varían la versión del estudio (instrumental) y se van a más de 11' de orgía musical con Dio desmadrado, Cozy Powell pateando traseros como un poseso, Blacmore y Carey "enfrentados" y Bain a lo suyo.
Es simplemente genial, una joya de la Música con mayúsculas, una demostración de técnica, sabiduría y seda en directo, uno de los más grandes y aún hoy sonando como si fuera ese año 1977.
La portada desentona, la foto del grupo con el arco iris podría haber sido infinitamente mejor, el interior una foto de cada músico en directo, y las fundas de los vinilos más fotos, todo mejorable.
"On Stage", Hard, Música, una obra maestra y si ya era único sentirlos y saborearlos así, con los años, treinta más, poder ver lo que hacían en ese momento fue, simplemente, impactante. 



3 comentarios:

  1. obra maestra sin mas, imprescindible, de una banda que se encontraba tocada por los dioses, fuesen de donde fuesen

    salud

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  2. Me ha sorprendido encontrar una mezcla tan maravillosa de estilos. Por una parte "Kill the king" o "Mistreated", más duros, frente a "Catch the rainbow" o "Sisteen century Greensleeves", sencillamente tiernos y evocadores.
    Genial.
    Ciao

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  3. Me fascina como suena aquí "Mistreated", es un vuelco en el alma y Dio está que se sale..pero el resto, no tiene desperdicio. Sublime y exclusivo. Un cien por cien de Rock duro con clase y..mi debilidad.

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