Una de Ellas

Hola, soy una de ellas, de esas ocho mujeres a las que les has dedicado un escrito tan sincero como brutal, pero que en el fondo no creía que fuese a ser así.

He leído "8 u 80", en tu blog, al que accedo de vez en cuando para (bueno vamos a decirlo si de sinceridad tratamos) no perder el contacto contigo, y me he encontrado con una declaración de intenciones realmente sincera y que no deja lugar a dudas sobre lo que se ha sentido, y quiero enviarte estas líneas para expresarte lo que a su vez he sentido yo.

Me da igual lo que hagas con ellas, si quieres hacer una entrada en "Paseando por los Sueños" hazlo, si lo lees y lo borras de tu memoria, pues hazlo, y si ni lo lees, pues vale, tú mismo.

Efectivamente soy una de esas ocho mujeres a las que has "descrito" más o menos en tu relato "Sono Morto Io" y he de decir que siento un regusto entre agradable y amargo; comencé riéndome de las ocurrencias, las situaciones, lo que ocurría, salvo por el hecho de que estuvieras muerto (algo muy tuyo, la verdad) y me lo estaba pasando realmente bien hasta que me encontré de frente con la amargura de muchas cosas, cosas que yo desconocía y que de pronto me venían dadas de golpe sin esperármelo.

No sé qué has pensado de nuestra relación (si es que se puede llamar así) pero que al final te sientas incomprendido, sin que casi nadie te haya entendido me sorprende, creía que teníamos esa conexión que tantas veces valorábamos y veo que todo era una montaña de humo, no teníamos nada, o al menos tú crees que no lo teníamos. No te voy a negar que tu voz me llevaba hasta el infinito, que me sentía especial con tus relatos, tus cuentos, tus historias, que me excitaba saber que era deseada, querida, y que tenía un Amigo que aunque no me viera podía quererme, pero tampoco te voy a negar que no sabía lo que tú necesitabas.

Puede que el error (si es que lo ha habido) haya sido no pensar en ti, no mantener esta relación al 50% (más o menos, que no es fácil, como tú mismo has dicho tantas veces) pero como mujer me sentía querida, deseada, abrumada, y eso querido es tan difícil que ocurra que puede que no haya pensado que tú también lo necesitabas, porque si vamos a ser sinceros, te diré que nunca he pensado que tú, el increíble hombre que abarca todo y algo más pudiera tener esa necesidad.

Soy mujer, orgullosa de serlo, feliz con mis orgasmos provocados y desde que estoy sola con los que me provocabas tú a través de tantas cosas, creo que los hombres son lo que son, bueno, sois lo que sois, y realmente eso sí me ha hecho pensar, que por mucho que me lo hayas dicho nunca he hecho caso a la frase tan tuya "no soy un hombre al uso", sí eres especial, pero no creía que no fueses "al uso".

¿Egoísmo? no creo, ¿necesidad? es posible; llegaste a mí en un momento de soledad y desarraigo y la verdad es que nunca te agradeceré lo suficiente lo que llegaste a hacer por mí, mi autoestima y mi yo como mujer, pero chico, ya lo siento si no vi más allá, estaba a otras cosas, uno de los tuyos, de los hombres, me había vejado, humillado y lacerado por el hecho de ser mujer, ¿que tú no lo harías nunca? seguro que no, pero necesitaba algo a lo que aferrarme, a lo que sujetarme, y me vinieron los "Cuentos No Contados", la maravillosa Música, tu voz... y yo estaba para mí, no veía que tú me estabas sacando.

Podría disculparme, pero sé que no es lo que quieres, a pesar de no reconocerlo sé que sabes que te quiero, y que a mi modo te conozco, no mucho quizás, pero algo sí, y tú no quieres disculpas, has echado fuera eso y ya está, ahí está, me lo has hecho llegar (supongo que a las demás también) y ya está, ese eres tú, lo haces convencido y yo no sé qué es eso.

Tampoco creo que estés contento con todo lo que has escrito, que lo sentías sí, en eso no hay duda que eres diferente, lo sientes, miras a los ojos (bueno, miras a lo que sea, porque tú y yo no nos vemos hace ¿cuanto? ni me acuerdo) y lo dices, eso no se puede negar, me lo enseñaste bien, aunque no lo puse en práctica, pero seguro que hacer daño te ha jodido, eres así, aunque el escrito es traca pura, no veas lo que dices de mí, chico, pero será así, si lo dices...

Bueno, pues adiós, ya no hay un "hasta la vista" está claro, que he sido egoísta, sí, que no te he querido, no, eso no, te sigo queriendo, por muchas cosas, pero sigo, y de vez en cuando la Música me lleva a ti, en eso sí que no hay duda, me diste un arma para vivir y te lo agradezco.

Ya que lo he descubierto (no te diré cómo porque es un poco rocambolesco, va de mujeres la cosa, como casi todo en tu vida) seguiré tu blog, es, ¡cómo no! fiel espejo tuyo, y ya le gustaría a muchos ser capaces de hacer algo así, "vas sobrao" y me gusta, a pesar de... ser mujer, que tú seas un hombre, de todo vaya.

¡Hasta Siempre, K.S., Agilulfo, Desius... no sé, Hasta Siempre!