miércoles, 4 de mayo de 2011

Un Día Cualquiera

El amanecer te sorprende en el teatro de tus ilusiones, actuando para ti mismo mientras intentas recitar la obra de tu vida, ese libro escrito a sangre y fuego que lleva impresa la dedicatoria de tu propia existencia.
Algunos creen que no somos sino el bufón de la mano que maneja los hilos, quizás el deambular por el mundo no sea más que recitar un guión escrito por otros, pero existe un universo paralelo, o dentro del propio en el que somos, donde nadie puede decidir lo que soñamos, lo que sentimos por todo lo que no es una guía escrita, porque está plasmado en el blanco de nuestros sueños, y eso sólo nosotros podemos completarlo.
Un día cualquiera deciden que no eres quien dices ser, que tu nombre es un recuerdo y tu imagen una ficción, pero los que realmente te sienten, todos aquellos seres en los que has marcado la huella de tu aliento, pueden salir de la monotonía del día a día y aspirarte aunque ya no estés con ellos, porque si realmente has entrado en sus entrañas, te sentirán como parte de lo que son, y en algún lugar, cualquier día, volverán a tenerte.

No hay comentarios:

Publicar un comentario